Un fin de semana, este pasado, muy diferente a los habituales para mi, hice un viaje al pasado, allá por las tierras de Burgos no tan lejanas en la distancia, si en el tiempo.

La tarde del viernes llegamos un grupo de Homo habilis al pueblo de Atapuerca, que fue nuestro cuartel general durante el fin de semana. Lo primero que hice fue subir a ese montículo donde se encuentra la iglesia del pueblo, nuestro alojamiento apenas estaba a un paso, y desde allí me hice idea de donde me encontraba. Una gran laguna era el centro de esa depresión natural formada por la Sierra de la Demanda por el este y la Sierra de Atapuerca por el oeste. Se comprende enseguida el porqué ese lugar dio fruto (casualmente) a tan espectaculares hallazgos de nuestros antepasados. Que mejor lugar para asentarse que junto a esas lagunas, hoy reducidas, por donde todo bicho viviente en su viajar tenía el paso obligado. El agua es lo que tiene, es imprescindible, aun hoy ese paso está frecuentado, forma parte del Camino de Santiago. Muchos, sin saberlo, están caminando por donde lo hicieron sus antepasados, estos detrás de su sustento que eran los animales que los precedían en sus migraciones y en su pirámide trófica.
Pero… y ahora, siglo XXI ¿por qué ese trayecto?, ¿qué nos impulsa a recorrerlo aún?, ¿qué evolución es esta? Se recorre aun y no por el sustento y la perduración del ¿por qué?, ¿memes tal vez? Pues no lo se, pero mis interrogantes acentúan más mi creencia de que no evolucionamos, que solo progresamos y malamente.
Amanece en las lagunas de Atapuerca como otro día cualquiera desde muchos, muchos, siglos atrás, los patos con su parpar entre juegos, los caballos que allí se encuentran pastando desde antes del amanecer, algún animal echo en falta para esos milenios atrás pero el sol es el mismo, templando la sierra de Atapuerca con sus primeros rayos aprovechados por esos antiguos parientes nuestros, y alguno que otro mirando ese amanecer como yo lo estoy haciendo en estos momentos, admirando y agradeciendo ese nuevo día y es que hay cosas que no cambian nunca, bueno excepto una vía de tren, unos antiestéticos molinos eólicos, el ruido allá a lo lejos de la N-1, y ese icono de poder y adoctrinamiento 036 ¿cosas de la evolución? o ¿del progreso?

Esta imagen es del museo de la evolución, eran aproximadamente las ocho de la tarde, fuimos diez los Homo habilis del grupo o clan que entramos al museo sobre las cinco de la tarde aproximadamente, estos somos los que quedamos, y es que en la evolución también fueron muchos los que se quedaron en el camino. Pero, ¡joder!, me confundió el Neandertal, parecía que iba a prosperar pero mira tu por donde el egocentrismo del Habilis triunfó en esa carrera de ser el dueño del planeta. ¡PORCA MISERIA!



Y todo por tropezarse con esta jodida piedra y de esta a esta otra y luego a esta de más allá. Pero todo eso poco a poco, tardaron un millón largo de años con la jodida piedra pero evolucionando. Evolucionando llegaron al gran descubrimiento, el "Euro" y a partir de ahí todos jodidos, todos lo quisimos y matamos por él e inventamos maquinas para matar más deprisa y mejor y quedarnos con todo el pastel este del planeta y todos sus recursos, e hicieron maquinas voladoras y hasta inventaron el trabajo, no para todos claro, ¿como iban a trabajar los que lo inventaron?

Ellos se vistieron con ropas elegantes y suntuosas y adoctrinaron al Homo habilis a su antojo y así seguimos evolucionando, evolucionando, y toda la culpa la tuvo este señor, que simplemente quiso honrar en su muerte a un buen amigo o tal vez a su hijo, con esas ofrendas y alguien se aprovechó de ello a partir de ahí y son muchos aun los que lo están haciendo en pro de la evolución, inventándose mil historias, y evolucionamos más y más pero… ¿hacia adonde? Vuelvo a remitirme a Einstein, dijo que solo existen dos cosas infinitas, el universo y la estupidez humana, pero dudaba de la primera, de la segunda estaba tan seguro como yo, que pena de evolución.



Y de esta guisa terminamos ya el lunes donde unos amigos de otro clan nos juntamos en la península de San Frutos viviendo otro atardecer más para estar a bien con nuestra Madre Tierra que no se si nos acogerá en su morada por evolucionistas pero por echar cuatro risas como la de ese día que no quede.



Por ultimo, una imagen de este retablo que vi expuesto en el museo de Santo Domingo de la Calzada intentando explicar una parte de la creación o evolución, aun estamos en ello. Un niño llegó de la escuela a su casa echo un lío:

- ¿Mamá de donde venimos?-

Y su madre le dijo:

- De donde va a ser hijo, nos creó Dios con todo su poder el séptimo día de la creación.- No convencido el chaval se fue a preguntar a su padre:

- Pero hijo, de donde va a ser, eso es producto de la evolución del mono, después de mucho, mucho, tiempo.-

- Mamá, mamá, dice papá que venimos del mono.-

- Si hijo, pero esa es la familia de tu padre.-